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¿Tu mascota está sufriendo en silencio? Signos de dolor en perros y gatos que no debes ignorar
En Panamá, muchas familias conviven con perros y gatos que son parte fundamental del hogar. Sin embargo, algo que pocas personas saben es que nuestras mascotas muchas veces ocultan el dolor. A diferencia de los humanos, los animales tienden a disimular el malestar por instinto de supervivencia, lo que puede dificultar detectar a tiempo un problema de salud.
En nuestra clínica veterinaria, vemos casos frecuentes donde los tutores llegan sin saber que su mascota ha estado sufriendo por días o incluso semanas. Por eso, es vital aprender a identificar los signos de dolor más comunes en perros y gatos.
¿Cómo saber si mi perro o gato tiene dolor?
El dolor en mascotas puede tener múltiples causas: infecciones, enfermedades crónicas como la artritis (muy común en perros mayores en Panamá), heridas, problemas dentales, o incluso el calor extremo que afecta a animales con enfermedades cardíacas o articulares.
Algunos signos de dolor incluyen:
- Cambios en el comportamiento: Si tu mascota se muestra más irritable, agresiva, o retraída, puede estar sufriendo. Muchos gatos, por ejemplo, se aíslan cuando sienten dolor.
- Vocalización anormal: Ladridos, maullidos o gemidos fuera de lo común son una señal de alerta.
- Cojeo o rigidez al moverse: Esto es frecuente en perros mayores o razas grandes como el labrador, sobre todo en climas húmedos como el de Chiriquí o Bocas del Toro.
- Pérdida de apetito o cambios al comer: Problemas en la boca o dolor abdominal pueden hacer que tu mascota rechace el alimento.
- Lamer o morder una zona específica: Puede indicar dolor localizado, como en articulaciones, heridas o infecciones cutáneas.
- Dificultad para dormir o descansar: Un perro que no puede echarse o un gato que cambia de lugar constantemente puede estar tratando de aliviar su malestar.
¿Qué hacer si sospechas que tu mascota tiene dolor?
En nuestra clínica veterinaria en la ciudad de Panamá, ofrecemos evaluaciones integrales del dolor, con profesionales capacitados para identificar signos clínicos que muchas veces pasan desapercibidos.
Nunca mediques a tu mascota por tu cuenta, ya que algunos analgésicos humanos, como el ibuprofeno, pueden ser tóxicos para perros y gatos. Es fundamental realizar un examen veterinario para diagnosticar la causa del dolor y aplicar el tratamiento adecuado.
El bienestar de tu mascota empieza por entenderla
Nuestros compañeros de cuatro patas no pueden decirnos con palabras que se sienten mal, pero sus comportamientos nos hablan todos los días. Si notas alguno de estos signos, no lo ignores. Acércate a nuestra clínica para una valoración profesional.
Recuerda: detectar el dolor a tiempo puede marcar la diferencia entre una recuperación rápida o una enfermedad prolongada. Tu mascota cuenta contigo.
